martes, 11 de mayo de 2010

Creer o no creer - Capítulo 1.

Pasadas las horas, ella ríe al ver una fotografía. Se para. Mira a todas partes y dice: "¡Basta!, ya está todo decidido". De repente llora. Su corazón había dejado de latir tan exageradamente como hace un minuto. ¿El motivo?, desconocido. No da señales de cuál puede ser la causa de su estado de ánimo tan repentino. Llaman a la puerta, es su madre. La madre anda hacia el cuarto de Paula. Paula al verla esconde algo entre las sábanas. Su madre extrañada le pregunta:
- Pau, ¿Qué escondes?.
Paula no contesta.
- ¿Aún sigues con lo mismo?, deja ya ese tipo de
problemas a parte, cuando crezcas verás que sufres
por algo insignificante y sin valor.
- Mamá, cierra la puerta y déjame sola.
- Pau, solo intento ayudarte a entrar en razón.
- ¿De qué tipo de razón me hablas?, ya te dije ayer que
no me volvieses a hablar.
- Lo único que intento es aconsejarte.
- No, tu no me aconsejas, solo quieres amargarme la vida.
La madre enfadada se va y cierra la puerta de un portazo, pero no
sin dejar una frase referente a un castigo mas: "No saldrás de tu
cuarto hasta que recapacites".

domingo, 13 de diciembre de 2009

Antes de hablar, actúa.


Severn Suzuki con solamente doce años de edad les calló a todos los políticos y representantes diciéndoles la absoluta realidad.
En vez de tanto hablar, ¿Por qué no actuar?, los políticos suelen prometer y decir muchas cosas que al final nunca las terminan de cumplir, es simplemente por conservar su puestos y quedar bien delante de sus contrincantes.

Si la Tierra depende de lo que digan o hagan los políticos que para mi opinión es insuficiente, el mundo, no en mucho tiempo, acabará siendo destruido y nosotros sabiendo esto no lo impedimos y si no lo hacemos es porque básicamente no queremos, más bien es algo imposible de lograr porque luchar contra todo tipo de injusticias al parecer no nos concierne a todos, visto lo visto.

¿Acaso la pobreza, las guerras y los huecos en la capa de Ozono no son posibles de solucionar?, si hay soluciones, solo que no queremos verlas y esto nos hace ser y ver que somos unos egoístas y que no valoramos lo suficiente todo lo que tenemos, habiendo tantos que no tienen nada, y si, me duele decir 'tantos' aunque es la triste realidad y sobre todo una verdadera vergüenza porque ellos tienen el mismo derecho que nosotros de tener comida, riquezas, amor y principalmente felicidad y todo esto se lo hemos quitado por ser unos avariciosos que no piensan en la cantidad de graves problemas que hay allí, en los países subdesarrollados, ¿no se puede ser feliz viendo como todos gozamos de la Tierra cuidándola y no destruyéndola?, pero no, nosotros preferimos ocuparnos de nuestros problemas y no de los ajenos, que al fin y al cabo destruir la Tierra es un problema más que nos incumbe y no menos importante.

Espero, aunque no lo creo posible, que este infierno llamado Tierra sea alguna vez un lugar en el que sólo hay felicidad, un lugar en el que todos tengamos las mismas posibilidades y privilegios.